sábado, 15 de mayo de 2010

IBM Banco Nación

La causa por el escandaloso pago de coimas se inició en 1994. El contrato entre IBM y el Banco Nación era de 250 millones de dólares. El sobreprecio, según la Auditoria General de la Nación e ingenieros designados por la Universidad de Buenos Aires podría llegar a 120 millones de dólares. Se estima que las coimas fueron del orden de los 20 millones de dólares.

Asunto terminado
El caso quedó cerrado en la Justicia; el Tribunal Oral Federal 3 respaldó el acuerdo al que habían llegado la Fiscalía y los siete acusados para ser condenados a penas de hasta 3 años de cárcel.

Nadie irá preso.
El Tribunal resolvió condenar a Alfredo Aldaco a la pena de tres años de prisión en suspenso, a Genaro Contartese, Mario Dadone y Hugo Gaggero a dos años y seis meses en suspenso y a Gustavo Soriani, Juan Carlos Cattáneo y Alejandro De Lellis a la pena de dos años y tres meses de cárcel, también en suspenso. Los cargos por los que fueron penados son administración fraudulenta agravada.

Interrogantes
Surgen sobre estos hechos algunos interrogantes. ¿Acaso los responsables de la administración fraudulenta agravada, es decir los coimeros, no formaban parte de una asociación ilícita? Además, el ministro de Economía, Domingo Cavallo, no podía desconocer el trámite de una licitación tan importante. ¿No estaba al tanto de que existía una oferta canadiense por un monto mucho menor que el requerido por IBM? Y en tercer lugar, pero no menos importante, ¿qué ocurre con la complicidad de IBM, partícipe necesario en este caso de corrupción?

Broche de oro
Casi simultáneamente con el conocimiento del fallo del Tribunal Oral Federal 3, Cristina Fernández inauguró la planta de IBM en Olivos, "resultó todo un gesto hacia la empresa", según el cronista de Urgente 24, "que podría interpretarse como un verdadero 'indulto'".
Yo no diría tanto, sino que su presencia fue notoriamente inoportuna.

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